La listeriosis es una de las enfermedades transmitidas por alimentos más graves bajo vigilancia en la Unión Europea, siendo la incidencia en nuestro entorno muy superior a la media europea. Considerando la fuerte asociación con la vía alimentaria en la transmisión de esta enfermedad, las actuaciones de control oficial deben evaluar la eficacia de las medidas que los operadores alimenticios llevan a cabo para la gestión del riesgo de este patógeno.
Para la prevención y el control de Listeria monocytogenes en alimentos listos para el cosumo es determinante conocer el nivel de este peligro en el momento del consumo. Para ello, es fundamental caracterizarlos de manera individual . Es importante determinar qué alimentos pueden favorecer el crecimiento de patógenos, cuáles requieren fecha de caducidad o fecha de consumo preferente, así como estimar el tiempo de vida útil en diferentes escenarios razonablemente previsibles.