La agència de Salut Pública de Barcelona (ASPB) realiza la evaluación de la calidad del aire en la ciudad y estima la exposición de la población a la contaminación, así como su impacto en la salud. El análisis de 2019 constata que la contaminación del aire en la ciudad es un grave problema de salud pública. Los resultados indican que es necesario actuar con medidas permanentes y transversales, priorizando las zonas más afectadas, para proteger la salud de las personas. La reducción global del tráfico motorizado es la medida más eficiente para respirar aire limpio.