El estado de salud de las personas viene determinado desde la etapa prenatal. La salud de las madres, sus condiciones de vida y de trabajo, así como los hábitos relacionados con la salud, pueden afectar a la salud del feto y a su vida posterior. La calidad de la crianza y las condiciones de vida de las familias afectan al desarrollo físico y emocional de los niños y determinan su salud física, psicológica y social a lo largo de toda la vida.